lunes, 28 de marzo de 2022

Autogobierno valenciano y Gestión Pública del coronavirus




En entrada de  08.11.2021 di cuenta  de La Gestión Pública   en la crisis de la pandemia: un ensayo crítico para la  Administración Pública universal y que fue mi aportación  a la  publicación de lo debatido en las Jornadas sobre autogobierno valenciano en la Universidad Miguel Hernández  celebradas el   6.10.2021  en la  Facultad de Ciencias  Sociales y Jurídicas  de Orihuela focalizadas en la gestión pública de la pandemia.

La lectura conjunta de las  intervenciones teórico-practicas en la jornada patrocinada por la GVA en el marco de la investigación político-institucional en la CV mostraron  algunos de los cambios o tendencias en las estructuras administrativas, disruptivos de los hábitos estándar, bien por instrucciones internas de continuo ajuste operativo, bien por adaptaciones espontaneas a las nuevas demandas y cambio de patrones en los administrados.  En esa dinámica mi intervención que se  recoge muestra desde una perspectiva sincrónica diferentes expresiones  de esos cambios en los distintos ámbitos generales de los sistemas político-administrativos según este esquema que s recoge en capítulo "La Gestión Pública de la crisis del coronavirus. Lectura desde la Ciencia de la Administración" de la obra colectiva Autogobierno valenciano y Gestión Pública del coronavirus que coordinado por la Profesora Victoria Rodríguez de la titulación de Ciencias Políticas de la UMH y  ahora se publica por Diego Marín.

 

I.-  EL HOY: LA GESTIÓN PÚBLICA EN CLAVE DE ENSAYO Y ERROR

1.1 Una  experiencia general en todos los niveles político-administrativos

1.2  El enfoque conductual universal

1.3 Otras experiencias misceláneas

II.- LECCIONES DEL AYER 

2.1 Administrar requiere racionalidad instrumental y coherencia ontológica

2.2 Los mercaderes siempre hacen lo suyo

III.- AVISOS PARA EL MAÑANA INMEDIATO

3.1 Un sistema de alertas en la tecnoestructura

3.2 Algunas propuestas para ya

3.3 Principios o proverbios del pasado para recordar también hoy


lunes, 21 de marzo de 2022

La Administración Pública ¿epifenómeno o impulso de lo sociopolítico? (y 3)

BBC NEWS publica el 20.03.2022 “Rusia y Ucrania: Putin ha rediseñado el mundo, pero no de la manera que él quería”. Señala el artículo seis momentos cruciales en la historia de Europa moderna  a su socaire;

      1789: Revolución Francesa. Monarquía derrocada, república fundada. 

        1815: El Congreso de Viena redibuja el mapa de Europa, restablece el equilibrio de poder y marca el comienzo de décadas de paz tras la agitación de las guerras napoleónicas.

       1848: Una ola de revoluciones liberales y democráticas en toda Europa.

  1919: Tratado de Versalles. Nuevos estados nacionales soberanos independientes reemplazan a los viejos imperios multinacionales

     1945: Yalta: las grandes potencias acuerdan dividir Europa en "esferas de influencia" occidentales y soviéticas. Cae el Telón de Acero por todo el continente..

        1989: Las revoluciones democráticas en la Europa del Este dominada por los soviéticos derriban el Telón de Acero. La Unión Soviética colapsa dos años después. Vladimir Putin llama a esto la "mayor catástrofe del siglo XX".

 Se añade un nuevo momento cuando Putin ordenó a las fuerzas rusas entrar en Ucrania el 24.02.2022, calificado por el canciller alemán, Olaf Scholz, de ‘zeitenwende’, un punto de inflexión, toda vez  que la secretaria de Relaciones Exteriores del Reino Unido,  dijo que era un "cambio de paradigma" en el que la era de la complacencia, dijo, había terminado.

 La UNED en Abril 2018 celebro  las XVI Jornadas de Geopolítica y Geoestrategia en torno a la reconfiguración del orden mundial.  En ellas se habló de un final de siglo XX con  cambios vertiginosos en la geopolítica mundial; la revolución Iraní y su posterior extensión; la disolución de la URSS-Pacto de Varsovia y de su  sistema de económico y de organización social; de la consiguiente pérdida de influencia a nivel global de la nueva  Federación Rusa; de  Francis Fukuyama publica y su “Fin de la historia y el último hombre”; el  atentado al World Trade Center de Nueva York, y la aparición de  Al Qaeda; Reconstrucción de nuevas las identidades culturales (Balcanes); El choque de las civilizaciones y la reconfiguración del orden mundial; Nuevas potencias emergentes como el subcontinente Indio,  Rusia y su esfuerzo por retornar al papel de potencia global, y a China, en busca  un posicionamiento acorde con tu potencial demográfico, económico y militar. Añádase lo vivido en el Cáucaso, Libia, Siria, Líbano, Mali, etc.

Todo esto invita a pensar de nuevo en la importancia de la Administración Pública como promotor o receptor de los cambios, como actor proactivo o reactivo, como epifenómeno dependiente o fenómeno principal. Para ello hay que – de la ayuda inicial de Baumman y Fukuyama – pensar en qué cosas han cambiado o lo están haciendo de verdad y, cuales deberían hacerlo radicalmente teniendo constancia de que una nueva era ha comenzado.


La Administración Pública ¿epifenómeno o impulso de lo sociopolítico? (2)

 Sexto.- Henry Fayol y la Administración General: Entrado ya el siglo XX Henry Fayol publica en 1916 su obra con la pretensión de que una sola ciencia administrativa se aplique tanto a las organizaciones públicas como en las privadas. Establece una suerte de Teoría General de la Administración y una doctrina administrativa aplicada al Estado, con la pretensión de ciencia positiva. Planteó en su tiempo que la función administrativa se preocupaba por la coordinación y armonización de todas las otras actividades, de tal manera que todas funciones del proceso administrativo deben ser conocidas y dominadas por todo director administrativo.

Se comprenderá pues que en este ambiente de absoluto abandono de la Ciencia Administrativa, triunfe la perspectiva, técnica y gerencial de Fayol que, junto con el taylorismo, se convertiría en notables nutrientes de la denominada teoría clásica, con énfasis en las funciones técnicas de la organización administrativa.

 Séptimo.- Max Weber y el Estado racional de occidente: Para Weber constituye rasgo esencial del Estado moderno occidental, la dominación legítima de tipo legal-burocrático en la que se da  la separación del cuerpo administrativo, de los medios materiales de administración. El Estado nacional proporcionó al capitalismo moderno las oportunidades de su desarrollo, gracias a la burocracia profesional y al derecho racionalmente preestablecido. La predictibilidad, según Weber, es la esencia del Estado racional moderno, superadora de aquellas -carismática o tradicional- reinantes a lo largo de la historia. La legitimación de la dominación burocrática se encuentra en este principio y en el aseguramiento del funcionamiento de la Administración, que funciona como una empresa estatal de dominio, a pesar de la suerte de las personas concretas, que entran y salen de la misma.

 Octavo.- Forsthoff y las bases científicas para el Welfare State: ErnstForshoff reconocería en Von Stein que la Administración y el Derecho Administrativo están en permanente cambio como consecuencia de las nuevas demandas de la economía, la sociedad y las constantes reivindicaciones sociales. Su idea de ‘Administración conformadora del orden social’ plasmada en 1938 en su obra La Administración como soporte de prestaciones, expresa la teoría de la ‘procura existencial’, en cuya virtud, el Estado debe proporcionar sino a todos, a una mayoría, el mayor grado de bienestar posible respecto a aquellas necesidades que el individuo no pueda proporcionarse por sí mismo. Según dicho planteamiento, el Estado social sería aquél que asume como función propia la garantía de la procura existencial de la población. El Estado debe de encauzar adecuadamente la tarea de la asistencia vital, asegurando las bases materiales de la existencia individual y colectiva. El ciudadano debe poder obtener de los poderes públicos, todo aquello que siéndole necesario para subsistir dignamente, quede fuera de su alcance. Ésta es la construcción de la Administración como servidora de la idea de Daseinsvorsorge  y a la consecuente configuración de la Administración como un soporte de prestaciones (Leistende Verwaltung).

Así para él el Estado Social entra en el Derecho Público por la puerta de la Administración y del Derecho Administrativo, debiendo evitarse que las funciones sociales sean objeto de instrumento de dominación. Surgirá un posterior desarrollo técnico en la acción del Estado y una necesidad de planificación para encauzar toda una acción pública desconocida hasta el momento.

 Noveno.- El resurgimiento del ave fénix administrativa: Finalizada la II guerra mundial y después del protectorado militar americano, será en IV República de De Gaulle cuando en Francia resurja la Ciencia de la Administración al crearse en 1945 la Escuela Nacional de Administración (ENA) y el Centro de Altos Estudios Administrativos de París. También contribuyeron los Institutos de Estudios Políticos y la Escuela Nacional de Ciencias Políticas de París. A la par en las Facultades de Derecho se iniciaron cursos sobre ciencias de la Administración. En la nueva Europa de la postguerra, debido a la expansión estatal, la Ciencia Administrativa tendrá su espacio propio, al margen o con el Derecho Administrativo en una perspectiva cada vez más sistémica con las obras del pensamiento  administrativo de época.

 Décimo acto.- Socialdemocracia y keynesianismo en la nueva Europa unida: El Welfare State (WS) como forma específica del Estado social es una determinada forma de intervención social y económica propia de los estados liberal-democráticos, con economías de mercado y pluralismo democrático y que fue consolidándose con carácter general en las democracias occidentales a partir de la postguerra. Su consolidación como modelo político fue fruto del matrimonio keynesianismo y de la democracia social (democristianos y socialdemócratas) en los inicios de las postguerra y hasta 1989 representó la última fase tanto de la sociedad industrial, como de la modernidad. El WS es fruto del pacto social-liberal entre todas las fuerzas políticas partidarias de la instauración del modelo, sobre todo después de que la socialdemocracia renunciara al marxismo.

Por lo tanto la historicidad demuestra que la Ciencia de la Administración ha estado presente en los momentos revolucionarios de nuestro contexto político-administrativo (revolución francesa, revolución de 1848, desarrollo industrial, progreso americano, desarrollo de postguerra y modelo del bienestar)

La Administración Pública ¿epifenómeno o impulso de lo sociopolítico? (1)

 Cuando se habla de las características de la Administración Pública se coincide en enfatizar dos aspectos especialmente; la dependencia de lo político, y la contingencia por diversos factores, de tipo económico, histoprico cultural, geográfico, etnográfico, sociológico,…

Un epifenómeno es un suceso fenoménico que es dependiente de otro fenómeno de superior rango.(vg. la urbanización de una ciudad es un epifenómeno del aumento demográfico). Pero también lo politico-administrativo puede ser un impulso de lo sociológico. (vg la retirada de subvenciones o la promoción del desploblamiento y probreza  en el mundo rural, provoca un éxodo hacia las metrópolis, en las que ya se ha iciado un prpceso urbanístico para viviendsa nuevas que estimulen el éxodo). Recrodemos como la industrialización urbabo fue denida a que los riocs aritocratas dejaron de invertir en la fisiocracia del campo y hacerlo en el proceso industrial mucho mas rentable. Lo que parece que si es más epifenómeno es la dependencia de lo administrativo hacia lo politiico, y lo político-administrativo, epifenómeno o impulso, según, sea reactivo o proactivo.   

Detrás de esto siempre hay un personaje o un colectivo que bien ha reaccionado ante una realidad cambiantes y debidamente analizada, para  adaptarse o para controlarla y/o cambiarla. Así tenemos a Kaultiya en el  Imperio Maurya inagurado por  Chandragupta  en el S. III ac) en el régimen indu de los Arthasastra,el influjo de Confucio en la dinastía Han (s. II ac),Octavio Augusto, (s.I ac),Napoleón (s. XIX), Fayol y Weber (s.XX)  y por supuesto aquiellos políticos o administradores  ciudadanos que acogieron con esntusiamos estos cambios.

 En el libro Administración Pública  y  Gobernabilidad: De los orígenes a los nuevos paradigmas de 2014 se da cuenta de esta doble dinámica en los sucesos de la historia occidental para observar como somos hijos causuales de la historia admionistartyiva. Así dijimos al aparatdo 5.3.2  sobre Revolución política, revolución  social y   ciencia administrativa que  No hay casualidad, sino causalidad e historicidad  en las aportaciones de la Ciencia de la Administración  Pública  en la conquista de nuestro modelo social. En la revolución política estuvo el pensamiento administrativo de Bonnin, en la revolución social estuvo el de Von Stein, y en el interregno el pensamiento español de la década ilustre 1840-1850. Más reciente Forsthoff estaría también en la construcción administrativa del Estado del bienestar.

La historia de la primigenia Ciencia Administrativa moderna revela que  el locus y el focus del objeto de estudio de la misma  deriva del mismo fenómeno social: Son los cambios revolucionarios y la necesidad de adaptarse de  los gobiernos, lo que está exigiendo una palabra  a la  Ciencia Política,  a la de la Administración, a la Ciencia del Estado. Todo ello como  adaptación de la vieja Ciencia de Policía.  Es patente la   correlación entre el pensamiento administrativo con la historia político-administrativa  en el que  influye la  Filosofía Política y Ética, la Economía,  la Sociología,  la Teoría del Estado y  el incipiente Derecho Administrativo. Todo ello redundará es  un cambio histórico de proporciones y consecuencias  inimaginables. Puede resumirse  que la obra de Bonnin es a la revolución política lo que la de Von Stein sería a la revolución social posterior. La  secuencia de hechos que describimos a continuación avalarían la reconsideración del pensamiento administrativo.

 Primero.- La Administración pública moderna y la lengua de los derechos: García de Enterría describió la revolución francesa, como un nuevo periodo social y político que supuso una ruptura con el ancien regime sustentado en un sistema de privilegios, al proclamar la libertad universal y pretender crear un hombre nuevo. La Administración moderna conlleva una nueva lengua de los derechos y la aparición de un nuevo derecho público y subjetivo.Se trata de una revolución, también lingüística en el sentido de institucionalizar nuevos conceptos para un nuevo estilo de vida, una lengua de los derechos, que daría un nuevo sentido y alcance a las ideas y conceptos de ‘igualdad’, ‘libertad’, ‘derecho’, ‘ley’, ‘poder’ ‘asamblea’ ’constitución’, ’responsabilidad’ de tal manera que el lenguaje mismo serviría de instrumento del cambio político y social con un nuevo Derecho Público, anclado en el principio de legalidad como requisito del ejercicio del poder y a la vez de la garantía de los derechos y libertades que institucionalizarían derechos subjetivos, instrumentos presentes en la Declaración de los derechos del hombre y del ciudadano de 1879. Montesquieau en la advertencia del autor a la edición de 1757 del Espíritu de las Leyes diría que “Yo he tenido ideas nuevas: ha habido necesidad, por tanto de encontrar nuevas palabras o de dar a las antiguas nuevas significaciones

 Segundo.-  Principios de Administración Pública de Bonnin: En 1808 aparecería la obra del Francés Charles Jean Bonnin, quien adaptaría la Administración Pública a las ideas de la revolución francesa considerando la existencia de una suerte de principios fundamentados en:

1) su origen en la asociación o comunidad,

2) la conservación de la comunidad es el principio de la Administración,

3) la Administración es el Gobierno de la comunidad y

4) la acción social es su carácter y su atribución la ejecución de las leyes del interés general.

Bonnin formuló en definitiva las líneas esenciales de la carrera administrativa moderna, anclada en una formación específica para el Agente Público.

Considerando que en todas las operaciones de la naturaleza se forma por escalas y el avance natural consiste en elevarse gradualmente de lo simple a lo complejo. Bonnin consideraría ejes de la organización administrativa, la división territorial y la marcha gradual en la formación del Agente.

 Tercero.- El Rechstaat (Estado de Derecho): Von Mohl lo definió en 1829 como un «Estado de la razón», aunque el término fue utilizado con anterioridad por la doctrina alemana si bien en un sentido muy impreciso. Von Mohl examinaría las posibilidades de actuación de la Administración en cuanto brazo ejecutivo del Estado liberal, pues pensaba que en el Estado se encierra toda la vida del hombre. La esencia del concepto es que todo el ejercicio público de autoridad está basado en el principio de legalidad. Esta idea iría extendiéndose por toda Europa como un reguero de pólvora.

 Cuarto.- LorenzVon Stein y su Teoría para la Administración moderna: Lorenz Von Stein en su perspectiva sociológica tuvo muy en cuenta la aspiración de sectores sociales conseguir influencia sobre el Estado debido a las desigualdades en la economía. Para él, el Estado debe estar sobre la sociedad promover las reformas sociales, pues el poder del Estado es un instrumento para entender y mejorar la sociedad. Parta evitar que las fracturas entre clases sociales originen una revolución, ese modelo de Estado ha de estar por encima de los intereses de todos los sectores sociales. El concepto puro del Estado de Von Stein conlleva un movimiento hacia la libertad que se contrapone al movimiento hacia la servidumbre que caracteriza a la sociedad. El Estado ideal no se deja arrastrar por la clase dominante, como en el Estado real, pues se contradice con su situación de dominio. El Estado, por encima de la sociedad, brilla más limpiamente cuanto más pretenden someterlos las fueras imperantes en la sociedad. Estado es por su esencia pura – como en Hegel – algo trascendente. Más tarde Stein continúa su planteamiento haciendo recabar en la Monarquía social – aprovechando la buena imagen de las monarquías europeas en la tradición clásica de la filosofía política del mundo cristiano-germánico-  un árbitro institucional que represente al Estado, situándose por encima de los intereses de la sociedad. Von Stein – influenciado otra vez por Hegel – considera positivamente a la monarquía por su carácter histórico de integración y dinamización.

 Estas ideas dieron origen al modelo de Estado social, como un estado que iniciaría una reforma a fin de mejorar la calidad de la vida de las clases bajas, evitando así, el proceso de las clases que buscan ascender socialmente. Para Von Stein la Ciencia de la Administración es una Ciencia Política. Punto de vista que confirma al concebir ‘la ciencia de la Administración interna’ como una de las cinco Ciencias Políticas (asuntos exteriores, ejército, finanzas, administración de la justicia y administración interna), coordinadas todas en un sistema, en cuanto aspiran a un mismo fin y se informan en un mismo principio: esto es, la idea unitaria del Estado que actúa/labora, el Estado pensado en actividad (Der Arbeitende Staat). La Administración es el organismo mismo de la vida social en su relación con la existencia y el destino moral supremo de cada individuo (Von Stein,  1865-1884).

Como uno de los pioneros del enfoque de la Ciencia de la Administración como una Ciencia del Estado –seguida por Von Mohl, Bluntschli, O. Mayer o K. Marx- nos diría que se acerca con pasos rápidos la época en que la Teoría de la de la Administración será reconocida como las pandectas de la Ciencia del Estado.

 Quinto.- Woodrow Wilson y los estudios para una  Administración Pública del progreso.  Wilson en 1887 aporta a  la Ciencia de la Administración la pretensión de una Administración Pública para los EEUU al uso europeo, pero adaptada a su concepción de Estado federal y democrático. Wilson planteo la necesidad de la distinción radical entre política y Administración y a la vez un paradigma de buena administración, inspirado en las burocracias francesa y prusiana. Lo primero que necesita para una Administración Pública acorde al desarrollo socioeconómico es una suerte de burocracia al uso weberiano, aunque repudie el sistema político totalitario, en el que se ha encarnado.

Lo que pretende Wilson es que lo que se hacía como un arte ahora se haga científicamente, por personas técnicamente capaces, bien formadas, por eso su otra preocupación es el estudio de la Administración Pública. Así puede comprobarse que en el último cuarto del siglo XIX se reformó la educación superior en EE.UU y entre 1870 y 1880 las universidades norteamericanas adaptaron la Ciencia del Estado que se impartía en las universidades alemanas a fin de formar personas que fuesen capaces de buscar un método similar al de las ciencias naturales para el estudio de la política.