jueves, 31 de enero de 2019

Delibecracia en el III Congreso Internacional de Calidad Democrática, Buen Gobierno y Lucha contra la corrupción



Los pasados días 24 y 25 de enero se celebró en Valencia la tercera edición del Congreso  internacional de Calidad Democrática, Buen Gobierno y Lucha contra la corrupción, organizado conjuntamente por la Universidad CEU Cardenal Herrera y la Asociación Valenciana de Politología (Avapol). En el congreso participaron diferentes miembros del Observatorio de Gobernanza, Transparencia y RSC como Marta Pérez Gabaldón, Organizadora del Congreso y Miembro del Comité Científico; Hugo Aznar, Miembro del Comité Científico, así como Javier PinazoElvira Alonso y Teresa Bruno como Comunicantes.

La jornada del día 25 arrancó con diversas mesas de comunicaciones sobre los tres ejes del congreso: calidad democrática, lucha contra la corrupción y buen gobierno en la que se presentaron diferentes estudios e investigaciones. En primer lugar, el profesor Javier Pinazo presentó la comunicación “Economía, eficacia y eficiencia como factores de funcionalidad de la gestión pública y proscripción de la corrupción”El trabajo de Pinazo hace un repaso de los enfoques dominantes en la Teoría de la Ciencia de la Administración moderna sobre el rol de la Administración (sistémico-funcional y heterofinalista), y propone para el Estado democrático de nuestros días un enfoque combinado, que aunaría el elemento weberiano de la doble racionalidad -material (ideológica) e instrumental (administrativa)- con la teoría de la “Efficient democracy”, en la medida en que ambos enfoques “pueden contribuir a una reconceptualización teorética sobre la proscripción de la corrupción en una cultura democrática occidental y desarrollada”.




https://blog.uchceu.es/delibecracia/iii-congreso-internacional-calidad-democratica-buen-gobierno-y-lucha-contra-la-corrupcion/?fbclid=IwAR1mJie5YiByf_b3naaHsV3KJbqJ7kh47eq5SqMqK_uDilshcMwlk9m6DmE

domingo, 27 de enero de 2019

Postverdad y populismos vs. fortaleza moral del Estado Social administrativo


Hablando en una reciente y entrañable  comida con amigos de mi primera socialización - con los que compartí bachiller, veraneo, tardofranquismo y expectativas políticas y económicas – surgio como no el escenario político y la tendencia al voto de castigo mediante las opciones populistas. No solo estaba yo como detractor de esta inútil opción que rechazo especialmente por lo errático de las opciones retrotópicas – utopía del pasado – para la ciencia política sino también por el perfil de sus abanderados (chamanes y casta en su día y ahora anticasta para volver a ser casta). Los peligros que esta tentación entraña en España y Europa fueron expuestos en el reciente congreso de esta semana en el CEU y  pueden verse bien argumentados en foros científicos de  rabiosa actualidad, de los  que ahora destacamos el siguiente
En agosto de 2016, The New York Times denunciaba abiertamente en el artículo titulado por Williams Davies “The age of post-truth politics” las informaciones inexactas, incompletas o directamente falsas difundidas durante la campaña del Brexit, alertaba del “declive de la autoridad de los hechos” y reclamaba para los periódicos el “deber de resistencia frente a la demagogia populista”  
En la misma línea, The Economist editorializaba en septiembre de 2016 sobre el riesgo de las noticias falsas y la creación de un estado de posverdad política que podría desembocar en acontecimientos similares al Brexit. En “Art of the lie”, The Eco­nomist alertaba del riesgo de este tipo de campañas políticas basadas en los sentimientos, no en los hechos, campañas que, como en el caso del Brexit, obligan a los oponentes a “luchar en terrenos que ellos no han elegido”
La posverdad consiste en un contexto social propicio para que los hechos objetivos (logos) sean relegados a un segundo plano del debate público por la irrupción de mensajes simbólicos con una acusada carga emocional (pathos). De donde se infiere que el éxito de estos mensajes depende de cómo sean interpretados por los ciudadanos en lo que Thomson (1997) llama “proceso de apropiación hermenéutica” de la realidad. Además, como señala José Ortega y Gasset (1914), el hombre está en un sistema de creencias que configura su estructura mental y que se impone en el proceso de atribución de signifi­cados a las cosas que percibe (realidad patente y realidad latente(…)
Con relación a esto hace cerca de cinco años tuvimos ocasión de  dar cuenta de la mejor politología al respecto de las tentaciones populistas y la crisis de las democracias liberarles;
(…)HERMAN HELLER a finales de la década de los ’20 del S. XX en plena crisis del parlamentarismo y auge  de los totalitarismos avisaría de la necesidad de transformar el Estado liberal  hacia un contenido económico y social, idea que terminaría positivizándose constitucionalmente en Alemania en Ley fundamental de  Bonn de 1949. La Constitución de Weimar introdujo por vez primera en la historia del constitucionalismo democrático occidental una lista de derechos sociales en el texto constitucional, aunque continuara manteniendo la formulación de la República como Estado de Derecho, lo cual supuso reconocer, en el ámbito de la Constitución, el fin de la concepción liberal del ED .
 La fórmula del  «Estado social de Derecho» (ESD) no aparece como tal hasta el turbulento período de la República de Weimar y concretamente de la pluma del teórico del Estado de orientación socialista Hermann Heller quien en un famoso artículo titulado Rechtsstaat oder Diktatur de 1930 , mantiene el planteamiento del Estado de Derecho liberal (ED) es ya caduco, a la vez que se posiciona  frente a las formulaciones sociales totalitarias del Estado, bien  de origen nacionalsocialista o bolchevique.
Heller introduce el adjetivo social en la fórmula originaria de ED para hacer valer su contenido original, esto es, recuperar los valores a los que estaba asociada la fórmula cuando sirvió de arma en la lucha contra el absolutismo . Así, el ESD se configura frente al concepto formalizado y desnaturalizado del ED,  como consecuencia del impacto de la revolución de 1848, la positivización del Derecho y el establecimiento del principio de actuación de la Administración conforme al criterio de calculabilidad del Derecho, para  conformarse,   la fórmula ESD como una recuperación del sentido original asociado a la idea de justicia social y de igualdad .
Injusto sería no referirse a  los  antecedentes de  mediados del siglo XIX, y que  el jurista y politólogo alemán W. ABENDROTH  observó en las primeras agrupaciones obreras que desencadenaron la revolución parisina de 1848. Concretamente, Abendroth  lo verá  en las reivindicaciones obreras, que exigían la consideración del trabajo como un derecho a proteger por el Estado  y en la exigencia de creación por el Estado de centros de producción gestionados por los propios trabajadores cooperativamente .
Madariaga hablaría del ‘fracaso de las clases directoras’  al referirse a las mismas  como uno de los factores que más ha contribuido al descrédito de las democracias liberales. En contra a los sistemas autoritarios, las democracias por su tendencia natural a debilitar los resortes de la autoridad políticas, necesitan que sus directores gocen de una alta autoridad moral y personal. Para Madariaga las clases directoras no se dieron  cuenta de la verdadera índole orgánica entre la sociedad y el Estado, absortos en los datos estadísticos que les legitiman, por mor de los votos.  Para el autor la democracia debe estar exigiendo pruebas constantes de la capacidad de sus dirigentes. Ya en su tiempo se refería al aumento de la complicación de la vida colectiva, en la que en la vida ciudadana se ve invadida por una expansión del rol del Estado de una parte y de otra de la lógica de la técnica, además de la  poderosa invasión en la vida colectiva por parte de los  poderes financieros y económicos. Igualmente se  ocuparía de  la  internacionalización del poder y de la entrega de la prensa al servilismo de unos cuantos con la conclusión de  la degeneración y descrédito  de las instituciones liberal-democráticas. (…)

lunes, 21 de enero de 2019

Sociedad,Gobierno y Administración en la Comunidad Valenciana


El próximo jueves siete de febrero, a las 19.00, se presenta en el salón de actos de las Real Academia de Cultura Valenciana (RACV) el número 94 de sus Anales dedicado a las instituciones de la Comunidad Valenciana desde la autonomía político-administrativa de 1985. Aglutina quince trabajos en el que han colaborando veintiún autores con un total de 491 páginas, conforme al siguiente índice :

PRESENTACIÓN: SOCIEDAD, GOBIERNO Y ADMINISTRACIÓN EN LA COMUNIDAD VALENCIANA
PRÓLOGO PRODEDEUTICO: SOCIEDAD, GOBIERNO Y ADMINISTRACIÓN: UNA HISTORIA ADMINISTRATIVA

§ Políticas públicas y programas de aprendizaje a lo largo de la vida en Valencia.
§ Algunes consideracions sobre la competència de la Comunitat valenciana en matèria de dret privat.
§ Los gremios artesanales de la ciudad de Valencia: pasado y presente
§ La Participación ciudadana en la tramitación de los planes urbanísticos municipales. 
§ El futuro de los acuerdos Iglesia-Estado en la Comunitat Valenciana.
§ Presente y futuro de la mediación como método alternativo de solución de conflictos en la Comunitat Valenciana. 
§ El nivel local en la articulación de la organización territorial valenciana.
§ El Síndic de Greuges, una garantía  institucional de los derechos de la sociedad valenciana.
§ El carácter bifronte del poder judicial. Una mirada a la administración de justicia en la Comunidad Valenciana.
§ Aportaciones del pensamiento valenciano para la teoría del Gobierno y  Administración española y europea. 
§ El politólogo al servicio de las instituciones políticas de la Comunidad Valenciana
§ La institucionalización de la evaluación de las políticas públicas en la comunidad valenciana: una necesidad inaplazable.
§ La Policía Local en la Comunidad Valenciana: un proceso de modernización institucional  al amparo de la regulación autonómica.
§ Función Pública autonómica: los cambios de modelo, viejos problemas no resueltos y nuevos que suscita, como el velo de Penélope. 
§  E-administración y la nueva normativa: reflexiones en torno a su impacto en el tejido administrativo y social valenciano.

http://www.racv.es/es/anales-de-la-racv


domingo, 20 de enero de 2019

Organizando el Leviatán

¿Por qué algunos países son menos corruptos y están mejor gobernados que otros? Desafiando las explicaciones convencionales sobre las notables diferencias en la calidad del gobierno en todo el mundo, este libro sostiene que la organización de la burocracia es un factor a menudo pasado por alto pero fundamental.




lunes, 14 de enero de 2019

III Congreso Internacional sobre calidad democrática, buen gobierno y lucha contra la corrupción


Damos cuenta de la tercera edición del congreso anual que organiza mi Universidad CEU-Cardenal Herrera  junto con AVAPOL y que tendrá lugar en Valencia los días 24 y 25 de enero de 2019, conforme al siguiente programa;

Jueves 24 de enero
09:00 Acreditación
09:30 Inauguración
  • Rosa Visiedo Claverol, Rectora de la Universidad CEU-UCH
  • José Carlos Arnau. Presidente de AVAPOL
  • Esperanza Ferrando Nicolau. Decana de la Facultad de Derecho, Empresa y Ciencias Políticas.
10:00 Conferencia Inaugural: “Defender la democracia en uno de sus momentos más difíciles".
Dr. D. Fernando Vallespín Oña, Catedrático de Ciencia Política. Universidad Autónoma de Madrid.
Modera: D. José Carlos Arnau
11:30 Pausa
12:00 Mesa redonda: “Calidad democrática y participación ciudadana: una relación indisoluble”
  • Modera: Pep Sastre.Ocho TV.
  • Toni Pla, Representante del Asociacionismo Vecinal
  • Antonio Penadés, Presidente de Acción Cívica contra la corrupción
  • José Manuel Felisi, Representante de la Asociación Mesura
  • Leyre Burguera, Observatorio de Gobernanza, Transparencia y RSC
16:00 Paneles de comunicaciones
18:00 Mesa redonda: “Una perspectiva práctica de la regeneración democrática. Propuestas con vistas a las elecciones autonómicas de 2019”
  • Representantes de los Grupos Parlamentarios en Les Corts Valencianes
  • Modera: Dra. Dª Marta Pérez Gabaldón
VIERNES 25 DE ENERO DE 2019
9:00 Paneles de comunicaciones
10:30 Pausa
10:45 Mesa redonda. “La prevención de la corrupción. Algunos aspectos de interés”
  • Beatriz Larriba. Abogada penalista en Public Compliance. Despacho Navarro Larriba.
  • Joan Llinares.Director de la Agencia Valenciana Anticorrupción
  • Adolfo Latorre. Inspector Jefe de la Policía Nacional
  • Juan Carlos Galindo. Presidente de ASEBLAC
  • Modera: Juan Carlos Galindo
12:30 Conferencia de clausura: “Medidas para combatir la corrupción”
  • Sr. D. Eloy Velasco Núñez. Magistrado de la Audiencia Nacional
  • Modera: Salvador Enguix.Delegado de La Vanguardia en Valencia
13:45 Clausura.


https://www.uchceu.es/actividades/2019/congresos/iii-congreso-internacional-sobre-calidad-democratica-buen-gobierno-y-lucha-contra-la-corrupcion/programa

martes, 8 de enero de 2019

¿La burocracia es la solución o el problema? (y 4) Resituación y reconceptualización de la teorética weberiana


     En Valdepeñas  del 9 al 11 de noviembre, 2018 con el título inseguridades y desigualdades en sociedades complejas se celebro el XX congreso internacional de sociología de castilla-la mancha.  Internacional Con el título ¿Sigue Max Weber siendo un referente para la sociología político-administrativa?, Reconceptualización de sus tipos ideales, presenté una atrevida ponencia acerca de una propuesta de Resituación de la racionalidad decisora o reconceptualización del tipo ideal weberiano, pero des un enfoque neoestructuralista superador en la actualidad del estructuralismo primigenio de la teorética weberiana.

Dicho en otras palabras las críticas tanto ideológicas, estructuralistas o neoestructuralistas a las propuestas burocráticas weberianas, influyeron en su adaptación a la funcionalidad organizativa por vía de relajación de algunos de sus principios de tal manera que la neoburocracia de hoy dista en la praxis de aquella percepción mecanicista e irreal en algunos aspectos.

 El tipo ideal-normativo weberiano del funcionario se ha visto relajado por mor especialmente de la escuela de las relaciones humanas y de los grandes experimentos de la psicología industrial o la conductista. Desde un estudio empírico de muy reciente factura – de elaboración propia - se justificaría la hipótesis de que los funcionarios no pueden ser ni medianamente ideales si  los políticos no lo son al menos mínimamente.

Cfr.
https://congresoacms.es/programa/

¿La burocracia es la solución o el problema? (3) La banalidad del mal

 Pero es la expresión ‘banalidad del mal’ acuñada por Hannah Arendt en su libro Eichmann en Jerusalén.  Un informe sobre la banalidad del mal es el recoge la verdadera lógica de una perversidad político-administrativa  del uso de la empresa estatal de dominación.  Según Arendt, Adolf Eichmann no poseía una trayectoria o características antisemitas y no presentaba los rasgos de una persona con carácter retorcido o mentalmente enferma. Actuó como actuó simplemente por deseo de ascender en su carrera profesional y sus actos fueron un resultado del cumplimiento de órdenes de superiores. Era un simple burócrata que cumplía órdenes sin reflexionar sobre sus consecuencias. Para Eichmann, todo era realizado con celo y eficiencia, y no había en él un sentimiento de «bien» o «mal» en sus actos. Para Arendt, Eichmann (…) no era el «monstruo», el «pozo de maldad» que era considerado por la mayor parte de la prensa. Los actos de Eichmann no eran disculpables, ni él inocente, pero estos actos no fueron realizados porque Eichmann estuviese dotado de una inmensa capacidad para la crueldad, sino por ser un burócrata, un operario dentro de un sistema basado en los actos de exterminio (…).
Sobre este análisis Arendt acuñó la expresión «banalidad del mal» para expresar que algunos individuos actúan dentro de las reglas del sistema al que pertenecen sin reflexionar sobre sus actos. No se preocupan por las consecuencias de sus actos, sólo por el cumplimiento de las órdenes. La tortura, la ejecución de seres humanos o la práctica de actos «malvados» no son considerados a partir de sus efectos o de su resultado final, con tal que las órdenes para ejecutarlos provengan de estamentos superiores.
La frase es utilizada con un significado universal para describir el comportamiento de algunos personajes históricos que cometieron actos de extrema crueldad y sin ninguna compasión para con otros seres humanos, para los que no se han encontrado traumas o cualquier desvío de la personalidad que justificaran sus actos. En resumen: eran «personas normales», a pesar de los actos que cometieron.
Por lo tanto es la burocracia en sí un instrumento neutra para fines buenos en el contexto weberiano; democracia y capitalismo  necesitan de un formalismo jurídico, técnico -organizativo y sociológico para el progreso social y el  ente gestor es el Estado-Administrativo. La Administración Pública weberiana es un agente instrumental; racionalizador de la sociedad; incrementador de la riqueza social disponible y  marginador del conflicto social (Estado social y administrador).
Hoy por hoy no hay alternativa a esta racionalidad instrumental, y  menos todavía después de las posiciones neoestructuralistas y  otros avances en la técnica organizativa (tecnoburocracia, neoburocracia, neoweberianismo, adhocracia,…) otra cosa será la racionalidad material ideológica del nazismo, el comunismo, el polpotismo, el maoísmo y tantos –ismos, en nombre del Príncipe, el  Estado o de la política al uso.  
En 1941 del dramaturgo Bertolt Brecht en la obra La resistible ascensión de Arturo Ui, le hace decir a uno de los personajes: (…) la perra que engendró a esta bestia (Hitler) está nuevamente preñada. Por Europa va la perra buscando un sitio donde dar a luz su cría. Esa perra está entre nosotros (…). 
La burocracia democrática de hoy puede ser un buen antídoto para evitar nuevas industrias de la muerte y del sufrimiento y si tenemos dramaturgos que nos vayan avisando de posibles nuevas bestias, tanto mejor.

¿La burocracia es la solución o el problema? (2) Jaula de Hierro y banalidad del mal


Ya señalamos en entrada del Blog de 16 de noviembre de 2016 que lo que se conoce como  “metáfora de la jaula de hierro” es una imagen retórica utilizada por Weber en una de las últimas páginas de La Ética Protestante y el espíritu del capitalismo para expresar la pérdida del sentido religioso original que inspiró,  al primer capitalismo.   Dice Weber: (…)El estuche ha quedado vacío de espíritu, quién sabe si definitivamente. En todo caso el capitalismo victorioso no necesita ya de este apoyo religioso puesto que descansa en fundamentos mecánicos.  … Nadie sabe quién ocupará en el futuro el estuche vacío, si al término de esta extraordinaria evolución surgirán profetas nuevos y se asistirá a un pujante renacimiento de antiguas ideas e ideales, o si, por el contrario, lo envolverá toda una ola de petrificación mecanizada y una convulsa lucha de todos contra todos; en este caso los últimos hombres de esta etapa de la civilización podrán aplicarse la frase ‘especialistas sin espíritu, gozadores sin corazón’. Estas nulidades se imaginan haber ascendido a una nueva fase de la humanidad, jamás alcanzada anteriormente (…)
La frase  de Weber  como tan habitual sucede fue popularizada  por Talcott Parsons al traducir como “jaula de hierro” (Iron Cage), lo que literalmente de definió  como “estuche”, “envoltura”,  “dura como el acero”, “férrea envoltura”, que en el sentido genuino de weber evocaba un caparazón duro y opresivo.  La metáfora advierte que los individuos pueden perder toda posibilidad de control sobre sus vidas o sobre el sistema social donde éstas se desarrollan, con el consabido déficit democrático - suponemos que en términos de libertad de elección-
Sin duda algo de esto se ha visto en  las experiencias históricas en el uso del aparato burocrático por los totalitarismos, o en las ensoñaciones orwellianas  pero es muy  cierto que  la burocracia es su perspectiva estructural-maquinal puede ser un mecanismo peligroso para llevar a cabo propósitos perversos con gran dosis de eficacia y eficiencia, tanto en nombre de la democracia como especialmente, sin contrapoder en los totalitarismos. Una muestra de la crítica histórica expuesta por Bauman puede verse en la visita a los  campos de concentración de Auschwitz – que hemos podido experimentar  personalmente -  en el sentido de comprobar cómo un mecanicismo impersonal sometido al terror puede convertirse en una industria de muerte. Ahí está  la magnífica película de Costa Gravas (2002) Amen son el inicial uso del gas Zyklon B y la denuncia espuria de un oficial químico del posterior   uso de destrucción masiva. 
(…) Dos sistemas: por una parte, la maquinaria nazi y, por otra, la diplomacia del Vaticano y de los Aliados. Pero dos hombres luchan desde dentro. El primero es Kurt Gerstein (personaje real), químico y miembro de las SS que se encarga de suministrar el gas Ziklon B a los campos de la muerte. Pero eso no le impide denunciar los crímenes nazis a los aliados, al Papa e incluso a los miembros de la Iglesia alemana a la que pertenece, jugándose de este modo su vida y la de su familia. El segundo, Ricardo, es un joven jesuita que representa a todos los sacerdotes que supieron oponerse a la barbarie, pagando muchas veces con su propia vida. Kurt Gerstein sabía lo que estaba ocurriendo y quería que el mundo entero también lo supiera. La película denuncia la indiferencia de todos aquellos que sabían lo que estaba pasando y decidieron callarse. (…) (FILMAFFINITY) https://www.filmaffinity.com/es/film651336.html

¿La burocracia es la solución o el problema? (1) Elogio de la burocracia


Paul du Gay en En elogio de la burocracia (Ed. Siglo XXI, 2012),  (httpsrecyt.fecyt.es/index.php/res/article/view/65494/39777) sostiene una posición contracultural  a las tendencias que al final del siglo XX – en el marco neocon y nueva gestión pública -  que mantenían que la gestión jerárquica y los burócratas, eran en la causa de todos los males, ya que en un escenario de incertidumbre, la flexibilidad, innovación y emprendeurismo son las cualidades adecuadas frente a posiciones muy estructuralistas.
Du Gay  en su obra contempla tres posiciones criticas;
La primera  es la realizada por el  filósofo comunitarista Alasdair MacIntyre. Enfocada en el gerente público, el cual sería la personificación de una moral emotivista que propugna la satisfacción de preferencias individuales usando para ello la adecuación entre medios y finescon independencia de criterios morales. Ello sería el síntoma paradigmático de la pérdida moderna del ideal de vida buena que antaño cohesionaba las comunidades, siendo sustituida por el intento utópico, abanderado por la burocracia y la ciencia, de controlar los aspectos de la vida social empleando la razón instrumental
La segunda crítica, formulada por Zygmunt Bauman otorgar un papel esencial a la burocracia en la ejecución del holocausto judío por parte del III Reich.La burocracia  es una muestra más del avance de una racionalidad instrumental en todas las esferas sociales desvinculada de normas morales. Su complejo sistema de división del trabajo, su cadena jerárquica de mando, su objetividad y su impersonalidad las que producen una separación creciente entre los actos realizados por los funcionarios y sus consecuencias. De ahí que fuera idónea para poder llevar a cabo tal tarea, dificultando a los burócratas ejecutores de las políticas de exterminio responsabilizarse moralmente de lo que comportaba la realización de las tareas asignadas. 

La tercera crítica esta en los discursos del management de  Peters o  Kanter,  que anunciaron  la llegada de la globalización, caracterizada por su carácter cambiante e incertidumbre , que requiere flexibilidad y espíritu emprendedor por parte de la burocracia pública.

La  cuarta crítica  es la proveniente del denominado gobierno empresarial de  Gaebler y  Osborne, compuesto por diez principios aplicados de forma heterogénea en las Administraciones Públicas de algunos países de la OCDE siguiendo como modelo  el de   la empresa comercial exportable universalmente a  cualquier entramado organizativo  encaminado a la provisión de bienes y servicios (contractualización, delegación, gestión  autónoma, …) 

Para el  profesor de la Copenhagen Business School, las críticas en última instancia no tienen una adecuada comprensión de la burocracia pública en tanto que es interpretada como un fragmento de una totalidad perdida que ha de ser recompuesta. La burocracia no es el mal, sino la salvación. Los atributos éticos del buen burócrata tales como la adhesión a los procedimientos, la aceptación de la obediencia y de la autoridad, el compromiso con los bienes de la función pública, etc., como virtudes que representan la organización jerárquica y su burocracia que  hoy siguen siendo imprescindibles para realizar una gestión adecuada y  evitar los comportamientos sectarios, e incluso para garantizar la misma existencia en común. Afirma que si se hubieran aplicado a la crisis económica estos valores, con un poder burocrático que hubiera regulado con un enfoque puesto en el bien común, las conductas excesivas de los actores económicos que nos llevaron a la depresión no habrían tenido lugar. 
Du Gay es notablemente popular en Escandinavia proponiendo un poder central y soberano, que se autocontenga y  que fije unas normas y unos procedimientos comunes y que sirva para garantizar la inexistencia de abusos, pues las  críticas a la autoridad y a sus reglas no han llevado a una situación de mayor libertad, sino a las arbitrariedades y a situaciones de dominación extraestatales que se compadecen mal con las normas teóricamente vigentes en las sociedades occidentales. . Dicho en palabras de otros (Pochard, Junger,George) cuando se retira el Estado  aparecen los titanes de siempre.


viernes, 4 de enero de 2019

¿Progreso o receso social? (y 2): El prestigio de la lejanía.

El prestigio de la lejanía. Ilusión, autoengaño y utopía (Verbum 2014)  en 1998  Premio Internacional de Ensayo Juan Gil-Albert - es uno de los  volúmenes del tratado Seudología del ex profesor de filosofía del CEU Miguel Catalán

La tesis psicológica de Catalán es en parte conocida: el consuelo de la imaginación es necesario para soportar la realidad; el autoengaño, necesario para soportarnos a nosotros mismos. Y sobre la obra se ha recensionado por Luis Veres  que  (…) supone una interesante reflexión acerca de la ilusión y el autoengaño que se presentan en la especie humana como una de sus intrínsecas características. El hombre ante su propia conciencia tiende a caer en la falsedad que fabrica su mismo pensamiento. Desde un planteamiento freudiano y deudor de  Lippman, Catalán sitúa el problema del hombre a la hora de encarar la realidad desde esa postura irrebatible del autoengaño del sujeto hacia el otro. Surge, de este modo, la idealización del pasado, la anticipación de los sucesos futuros, desde lo que se desea a lo que se teme, o yendo más allá, la creación de utopías, de lugares fascinantes en donde la frustración del sujeto resulta inexistente y en donde el pensamiento del hombre ha llenado las oquedades del vacío de la existencia aproximándose en un espacio de perfección en donde las contradicciones desaparecen como consecuencia de esa ilusoria óptica del hombre (...)

En El prestigio de la lejanía, nos encontramos con (…) esa necesidad de mentiras, de imaginarios, en los que el hombre requiere sumergirse para sobrevivir en medio del dolor que implica la vida. La sujeción del hombre a los mitos también se incluye en esta dependencia de la confección del tiempo pretérito como una respuesta a esa idealización que requiere el hombre para subsistir: América, el buen salvaje y el mito del habitante originario del Nuevo Mundo, cuestiones que se fabrican en el S.XVI con Bartolomé de las Casas y que perdura hasta la actualidad con puntales intermedios en Russeau, Voltaire o los poetas románticos del S. XIX, entroncan en esta perspectiva de creación de utopías que no apuntan a otro lado que a la necesidad del engaño del hombre ante su propia realidad y la necesidad de superarla. (…)

Para Miguel Catalán resulta que siendo el optimismo un engaño en sí mismo, es algo positivo para la colectividad. Si los pesimistas son más conscientes de sus posibilidades, y por ello no se arriesgan ni se aventuran en empresas poco atrayentes, el  optimismo de algunos es saludable  para la sociedad, como elemento estimulante, narcótico o potenciador de esperanzas y de nuevos adeptos a las empresas colectivas, y sobre todo, en épocas objetivamente inciertas.  Pensemos aquí los esfuerzo argumentativos de los gobiernos por hacer creer que la cosa va bien, el alza del Ibex, de las cotizaciones, del empleo, la construcción, …

Lejanía es que los españoles tiene mayor confianza en la Unión Europea que en cualquiera de los niveles político-administrativos de España. Y sobre optimismo vs pesimismo puede verse un buen referente en un estudio del Profesor Xavier  Ballart de 2010;

(…)Si observamos lo que afirma el entorno social sobre la Administración Pública española comprobamos que la mitad de la población opina que su funcionamiento es peor que en los últimos cinco años (AEVAL, 2015). Datos de opinión pública sobre confianza en las instituciones políticas, revelan  la desconfianza hacia los políticos, en un buen número de países de la OCDE, mientras parece haber mejorado la confianza en los funcionarios públicos. No está claro que los esfuerzos en mejoras objetivas de la gestión pública se traduzcan en mejoras de los resultados objetivos en los distintos ámbitos sectoriales y que todo ello repercuta en la confianza de los ciudadanos en su Gobierno y Administración.  Muchas veces esa  confianza es debida a  la evolución del entorno  o por el impacto de otros factores en la  ciudadanía, en particular cuando tienen su expresión en los medios de comunicación (…).

España va bien, fue un conocido eslogan de momentos liberales domésticos” y produjo sus efectos ya conocidos y  ahora parece  que se retoma en otros lugares. Esto en sí es positivo, como sería muy positivo que los españoles tuvieran mejor criterio acerca de las cosas que se hacen bien en su país. Aquí la, politología y la sociología tiene una labor crucial para efectuar un diagnostico equilibrado como marco teórico y empírico para efectuar buenos análisis de prospectiva sobre los frutos por recoger que aún le quedan al trinomio democracia-burocracia-capitalismo regulado como estructura y la funcionalidad que se espera de los gobiernos y la ciudadanía.

Cfr.

Ballart,X., “Una presa difícil de atrapar: el rendimiento de gobiernos y administraciones públicas” Revista Española de Ciencia Política, 22,  2010.


¿Progreso o receso social? (1):Botella medio llena o medio vacía

El 29.12.2018 se publicaba un interesante artículo en ABC relacionado con la percepción social en el occidente desarrollado sobre nuestro presente que a su vez guarda relación con la entrada anterior acerca de una perspectiva sobre lo doméstico español.
Entre la desconfianza generalizada hacia el presente y el futuro el economista californiano Todd G. Buchholz, ex director de la oficina económica de la Casa Blanca se queja de la pérdida del «grit» - firmeza de carácter- de la sociedad americana  y muy especialmente sus jóvenes. Esta epidemia de pesimismo  atenaza a dicho  país, mostrándose la gente la gente  cada vez más acomodada -  ‘‘Generación Por qué Molestarse’’ - 
Hace unas décadas un universitario medio cambiaba de estado unas 10 veces en su vida profesional en busca de mejoras laborales y ahora para Buchholz el número de veinteañeros que lo hace ha disminuido  un 40% - con poco interés  de obtener el carnet de conducir - . Ahora impera un híper hedonismo, con desgana de trabajar y desidentificación con el país y e interés común. Ahora la patria es Facebook. Los tres pilares que hicieron grande al apios están en crisis:  Movilidad, confianza y grit
Pero frente a los agoreros del presente y futuro un grupo de pensadores y empresarios han iniciado una suerte de cruzada por el optimismo y la defensa de la utilidad de la democracia liberal, la Ilustración y lo los valores occidentales.  El personaje más popular de estos promotores del optimismo es Bill Gates  quien señala que tenemos una visión sesgada de la realidad y lo argumenta; Las malas noticias irrumpen como un drama, mientras que las buenas van generándose poco a poco y no parecen hechos noticiosos.
A comienzos de este 2018, hizo pública una lista con cinco motivos por los que deberíamos ser optimistas. 

 1) Desde 1990 ha caído a la mitad el número de niños que mueren antes de cumplir cinco años. 
2) En ese mismo periodo, las personas en extrema pobreza pasaron de un tercio de la humanidad a uno de cada diez.
3) Hoy el 90% de los niños del mundo acuden a la escuela primaria. 
4) Las mujeres ocupan la quinta parte de los escaños de los parlamentos del mundo. 
5) La seguridad en el puesto de trabajo y en las carreteras ha mejorado espectacularmente desde el siglo XX.

De otra parte Hans Rosling, médico y cooperante sueco atribuye a la visión negativa del presente: una visión romántica de nuestra juventud, que nos hace evocar el pasado como mejor de lo que era; los periodistas y activistas se quedan siempre con las noticias negativas;  si sostienes que las cosas van bien transmites la imagen de alguien sin corazón. En su libro Factfulness (Realidad) propone  un test sobre  diversos problemas del mundo y los  resultados de la encuesta entre personas de trece países (los españoles figuran siempre entre los más pesimistas). 
Así aparecen preguntas como;
ü     En los países pobres del mundo, ¿cuántas niñas finalizan la primaria?». La respuesta correcta es el 60%. 
ü     En los últimos años, el porcentaje de la población mundial que vive en condiciones de extrema pobreza... ¿Se ha duplicado? ¿Se ha mantenido? ¿Se ha reducido a la mitad?». La respuesta correcta es que  ha caído a la mitad.
En suma se afirma que no conocemos el mundo en que vivimos y que opinamos que va mucho peor, instigados por un populismo que fomenta la progresofobia y unos medios de información continua que nos infundan con un carrusel frenético de desgracias.
Steven Pinker, un psicólogo experimental, uno de los apóstoles del optimismo liberal, a firma que si las noticias reflejan un mundo del siglo XXI  sumido en el caos, el odio y la irracionalidad, hoy  nuestras vidas son más largas, con muchos más bienes, más seguras, saludables, felices, pacíficas, estimulantes y prósperas y todo ello merced a  los valores de la Ilustración; la razón, la ciencia y el humanismo. Esto ha ocasionado que el mundo sea 200 veces más rico que hace 200 años, el número de muertos en guerras ha caído a la cuarta parte respecto a los años ochenta, las personas son más inteligentes y más humanas, el coeficiente intelectual ha crecido unos 30 puntos en los últimos cien años y la población mundial se ha duplicado en los últimos cincuenta años, mientras que el número de desnutridos ha caído un 20%. 
Para Pinker el  pronóstico es que  la democracia liberal y el comercio e intercambio global están aquí para quedarse y no lo derribarán las insurgencias populistas. Las amenazas advertidas (inteligencia Artificial, ingeniería genética, cambio climático,  estancamiento económico, alimentos para los 11.000 millones de seres humanos,…) no obstan al optimismo y el progreso  como esperanza frente a las horas de demagogia fúnebre neomarxista y  neoautoritaria.